Hoy en día, la gran atención de las personas a los problemas ecológicos, de recursos y ambientales provocados por el desarrollo económico ha ido en aumento, donde la Economía Circular se ha convertido en una nueva probabilidad en la teoría y la práctica, buscando lograr los mayores beneficios de desarrollo con el menor consumo de recursos y costos ambientales posibles.
La economía circular puede transformar y construir un nuevo sistema económico que no solo mejore la eficiencia de la utilización de los recursos, sino que también ahorre recursos, reduzca los costos de producción y mejore los beneficios económicos integrales y a su vez mejore eficazmente el entorno ecológico, creando nuevos puntos de crecimiento económico.
Qué es la economía circular
La economía circular ha pasado de ser una propuesta utópica a una solución alternativa de un modelo de producción tradicional que ya no está logrando los resultados necesarios. Por lo que la economía circular es una propuesta para cambiar la forma de cómo se produce en el futuro, con el fin de lograr que cada producto tenga múltiples ciclos de uso y producción, es decir, que el fin de un producto alimente el comienzo de otro.
«El objetivo es que los recursos se conviertan en productos, los productos en residuos y los residuos en recursos», como menciona el presidente de la Fundación para la Economía Circular.
En el sistema tradicional lineal de producción, la constante era “tomar, hacer y desechar”, ahora la economía circular se basa en «reducir, reutilizar y reciclar». Se busca que en este modelo no existan residuos: todos los materiales y productos de la cadena productiva sirven para alimentar otros sistemas.
Es importante mencionar que este cambio va más allá del reciclaje, no es simplemente minimizar o reparar los daños que se ocasionaron con el sistema lineal de producción, es hacerse cargo de las causas.
Beneficios de la economía circular
La economía circular puede beneficiar de gran manera a las empresas con las oportunidades y ventajas competitivas que ofrece:
Rentabilidad: La secuencia «reducir, reutilizar y reciclar» permite a las empresas optimizar sus recursos. Según un estudio de McKinsey & Company, consultora estratégica global que se focaliza en resolver problemas concernientes a la administración estratégica, si tan sólo el sector de la manufactura adoptase este sistema, se ahorrarían unos 680 mil millones de dólares y se crearían decenas de miles de puestos de trabajo.
Colaboración: La economía circular requiere que las empresas comprometidas cooperen entre sí, ya que podría ser que los residuos de unas sean los recursos de otras. El evento global Open Source Circular Economy Days promueve la colaboración y definición de códigos abiertos entre países e industrias: “Necesitamos transparencia en los procesos de fabricación y producción. Necesitamos productos que se puedan entender, desmontar y reparar. Necesitamos compartir conocimiento de cómo fluyen los recursos en todo nuestro sistema. Y cuándo se desarrollan buenas soluciones, tenemos que ser capaces de usarlas, para construir sobre ellas y mejorarlas para el beneficio de nuestro planeta y nuestra sociedad” de acuerdo con Forbes.
Reputación: Últimamente la mayoría de las empresas han comenzado a preocuparse por el impacto ambiental de sus actividades productivas por lo que han desarrollado políticas de responsabilidad medioambiental para reducir la emisión de gases de efecto invernadero, la contaminación de agua, la desertificación, etc. Si estas empresas comenzaran a adoptar el modelo de economía circular, representaría un gran paso y posibilitaría la diferenciación respecto a otras empresas. Con esto pueden construir reputación y generar confianza. De acuerdo con la última encuesta de Deloitte, 3 de cada 4 personas creen que las compañías están demasiado centradas en sus propias agendas y no prestan suficiente atención a los problemas de la sociedad.
Innovación: La economía circular genera un ecosistema favorable para la innovación, con lo que se promueve la aparición de nuevos negocios. Janez Potočnik, el comisario de Medio Ambiente de la Unión Europea menciona: “La economía circular será el gran reto de innovación durante los próximos decenios”. “Hoy somos más de 7.3 mil millones de habitantes el mundo y se estima que para 2050 ya seremos más de 9 mil millones”. Con lo anterior la demanda aumentará un 25%, pero la oferta de recursos no.
Ante este panorama, la economía circular se está convirtiendo en una solución alterna de un modelo de producción. A lo largo del tiempo se convertirá en una necesidad, pero también una oportunidad para que líderes empresariales se conviertan en los protagonistas del cambio hacia un modelo sostenible, rentable, colaborativo, reputado e innovador.
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