Las empresas han seguido el camino de la adopción de nuevas tecnologías que les permite dar continuidad a sus operaciones, ocasionando la necesidad de contar con talento altamente capacitado en la implementación de dichas tecnologías.
En la actualidad, las tecnologías 4.0 están siendo un apoyo primordial para el talento que lleva a cabo procesos de fabricación de producto, de manera que las personas están colaborando con las nuevas tecnologías de forma efectiva, impulsando la productividad. Según el informe El Futuro del Empleo del Foro Económico Mundial, el 50% de los empleados necesitarán volver a capacitarse para el 2025.
Esta adaptación tecnológica está transformando los roles y actividades de los empleados, al mismo tiempo que está creando nuevos trabajos enfocados en la gestión de nuevas tecnologías, siendo un impulso para el talento hacia la adquisición de nuevas competencias y habilidades a través de la capacitación y el aprendizaje, lo cual es un factor determinante para el éxito de las empresas.
Para aprovechar las oportunidades creadas por estas tecnologías, muchas empresas se han embarcado en una reorientación de su dirección estratégica, buscando capacitar a su talento para hacer frente a los retos que conllevan estos cambios.
De acuerdo con The World Economic Forum se estima que el 87% de las empresas manufactureras han acelerado su digitalización durante el último año. Sin embargo, solo unos pocos aprovechan la tecnología para asegurarse de estar preparados para el futuro de la fabricación avanzada.
Para que las empresas sigan siendo competitivas en un panorama de fabricación cada vez más complejo, estas deben ir más allá de una narrativa de automatización y considerar el papel potenciador del aumento, esto implica colocar a la fuerza laboral como uno de los puntos clave.
Antonio Crespo, socio director de Consultoría de Deloitte España, menciona que “estamos en una sociedad en la que el futuro y el conocimiento dependen del talento”, el director ha mencionado tres motivos por los que se están produciendo cambios relevantes:
- Los avances y la aceleración de la tecnología.
- El modelo híbrido de trabajo ha llegado para quedarse.
- Los cambios de trabajo y con ello el cambio de las capacidades de las personas.
La adopción de nuevas tecnologías está, sobre todo, rediseñando las capacidades en los puestos de trabajo. El reto que enfrentan los líderes de las empresas es cómo rediseñar y ayudar a tener las capacidades y habilidades que son técnicas y específicas para el empleo correcto de las tecnologías que trae consigo la Industria del Futuro.
Por lo que, aunque es una realidad que las tecnologías como la automatización, la virtualización, la robótica, la inteligencia artificial, entre otras, han optimizado los procesos de producción de las empresas, el talento es quien hace posible su correcto funcionamiento y escalamiento.
Es necesario el desarrollo del talento para impactar en la productividad de las empresas, así como indispensable para la adopción de nuevas tecnologías, por tal, es responsabilidad tanto del talento como de las empresas buscar las herramientas y oportunidades de capacitación, para la adquisición de las habilidades y competencias que la Industria 4.0 requiere.
El desarrollo del talento es un componente requerido para que una empresa se sostenga y mejore su competitividad, siendo un costo / beneficio que impactará en la productividad y crecimiento de los fabricantes, permitiendo a los empleados adaptarse a las nuevas tecnologías de una mejor manera y así lograr una inteligencia colectiva entre máquinas y humanos.
Si tu organización ya cuenta con un proyecto de transformación digital y deseas conocer más sobre las soluciones que tenemos para formar parte de la Cuarta Revolución Industrial, contáctanos y recibe asesoría por parte de uno de nuestros expertos.
